Andagoya: una ordenación inolvidable
Jefferson Chaverra Paz, SJ recibió las Órdenes Sagradas en su pueblo natal, el pasado 28 de agosto de 2021. ________________________________________________________________________________________ En una ceremonia comunitaria, de inmensa generosidad y belleza, Jefferson Chaverra Paz, SJ recibió las Órdenes Sagradas, en compañía de sus amigos y amigas, hermanos y hermanas de Andagoya (Chocó), en donde se encuentra su casa materna. La ordenación se realizó por la imposición de manos y la Plegaria de Ordenación de Monseñor Juan Carlos Barreto, obispo de Quibdó, en el Templo del Sagrado Corazón de Jesús. Andrés Rosado, SJ, coordinador de la Oficina Provincial de Comunicaciones, nos comparte una mirada de esta ordenación inolvidable. *** Emocionante desde el comienzo, resultó la experiencia de la ordenación de Jefferson en su pueblo natal, porque no importó la incesante lluvia chocoana como para que los dieciséis jesuitas que asistimos a este acontecimiento, sin precedentes en la historia de Andagoya, recibiéramos tanto cariño y aprecio por parte de una comunidad tan llena de júbilo y totalmente comprometida con el éxito de la emocionante celebración. Luego de dos horas de camino por la carretera que conduce de Quibdó a Istmina, arribamos al municipio de Andagoya, situado en la desembocadura del rio Condoto en el San Juan. Al bajar del bus, recibimos la más cálida bienvenida por parte de la comunidad, que engalanó las calles de Andagoya con listones y flores multicolores, además de la infaltable música y danza típica que hicieron las delicias del grupo de jesuitas, tratados en calidad de huéspedes ilustres. Los siguientes dos días, la celebración y el regocijo resultaron todo un éxito, pues fue maravilloso ver como toda la comunidad andagoyense se dispuso, hasta con dos años de anticipación, para el logro del objetivo propuesto, en palabras de doña Martha Guerrero, una de las organizadoras del evento: “nosotros al celebrar la ordenación, también queremos que muchos jóvenes se animen, a ejemplo de Jefferson, a seguir los pasos de Cristo con más vocaciones al sacerdocio y la vida consagrada”. Sin duda alguna, este bonito acontecimiento vivirá en la memoria de la comunidad de Andagoya como un claro ejemplo de la innegable presencia de Dios que anima y dispone para que la fe se sostenga con suficiente fuerza desde la sencillez y la alegría de la gente. Consulta la galería fotográfica aquí.