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Apoya la labor del Hospital Universitario San Ignacio y súmate a la campaña “Yo soy amigo del HUSI”

Tu donación nos ayudará a mantener la operación del hospital, especialmente ante la contingencia de la COVID-19. _________________________________________________________________________________________________________________ El Hospital Universitario San Ignacio es una institución que brinda cuidado médico humano, seguro y eficiente con énfasis en alta complejidad. Como institución líder, desarrollamos investigación, aportes innovadores y sostenibles al sistema de salud y a la comunidad. Desde la llegada de la COVID-19 al continente americano, el Hospital comenzó a prepararse con la realización de protocolos y lineamientos de atención, adquisición de elementos de protección personal, adecuaciones físicas, reestructuración y ampliación de servicios. Adicional a esto, hemos estado comprometidos con el estudio constante y capacitación de cada uno de los empleados del Hospital, toda vez que entendemos que un trabajo rápido, coordinado y con los parámetros de seguridad es la mejor garantía para nuestros usuarios. La gran inversión que hasta ahora hemos realizado, además de la baja demanda de servicios de salud por el confinamiento de los colombianos (y el temor de asistir a un centro médico), ha disminuido considerablemente nuestros recursos económicos que ya han empezado a impactar en nuestro sostenimiento básico y en el pago del salario de nuestros más de 3 mil empleados. Por eso, hoy queremos impulsar la campaña de donación “Yo soy amigo del HUSI” con la cual recurrimos a su apoyo y solidaridad en busca de ayuda financiera que será vital para mantener nuestra operación y cumplirle a todo nuestro personal médico, asistencial y administrativo. Porque gracias a ellos podremos afrontar con capacidad y conocimiento todas las atenciones de salud que se requieran. Con los aportes lograremos: – Seguir garantizando el pago de nómina de manera oportuna y completo a cada uno de nuestros empleados. – Continuar con todo el personal necesario para el proceso de atención, sin prescindir de algún cargo. – Adquirir más elementos de protección personal e insumos necesarios para la atención de esta contingencia. – Seguir realizando los pagos oportunos a nuestros proveedores. – Lograr la sostenibilidad financiera en este tiempo de Pandemia. Queremos contar con sus aportes, sin importar el valor, pues cada ayuda sumará para que podamos cumplirle al país. A todas las personas que nos apoyen y requieran su certificado de donación, pueden solicitarlo al correo comunicaciones@husi.org.co. Para donar ingresa a la página www.husi.org.co. ¡Súmate a nuestra causa y recuerda que unidos somos más!

«Perdonar y pedir perdón no puede convertirse en un acto político»: Francisco de Roux, S.J.

En una entrevista para Noticias Caracol, el jesuita colombiano y presidente de la Comisión de la Verdad se refirió al proceso de reconciliación en Colombia, a la luz del reciente encuentro entre la senadora del Partido Farc Sandra Ramírez y Carmenza López, víctima del conflicto armado. _________________________________________________________________________________________________________________ Francisco de Roux, SJ, presidente de la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, ofreció sus reflexiones en la emisión del 28 de agosto de Noticias Caracol, a propósito del encuentro entre Carmenza López, víctima del conflicto armado y Sandra Ramírez, senadora del Partido Farc. Lo que para muchos podría ser considerado un simple acto de «no perdón», tiene en realidad un significado más profundo en términos de las exigencias de las víctimas del conflicto en Colombia, pues es a partir de su dolor y de su grito de dignidad que se nos invita a reconciliarnos.  «El perdón no se le puede presionar a nadie. Ante una víctima, nunca podemos exigir el perdón. Porque el perdón es algo sagrado, es casi un milagro que sale del corazón, es un gesto extraordinariamente generoso y de libertad absoluta». El P. Francisco invita a entender el perdón no como un acto político, sino como un proceso en el que se juega el alma y el inmenso respeto a la vida. Consulta la entrevista completa.

Revista AURORA No. 8 | Tiempos movidos

La octava edición de la revista plantea varios interrogantes en el contexto de la pandemia, relacionados con el trasfondo social de nuestra realidad, el dolor de las poblaciones más afectadas y los aportes de la Espiritualidad Ignaciana. _________________________________________________________________________________________________________________ Imagen tomada de AURORA No. 8 _________________________________________________________________________________________________________________ Las preguntas y reflexiones sobre la pandemia se hacen cada vez más pertinentes, a medida que los meses avanzan, pues la COVID-19 ha cuestionado profundamente nuestro modo de vida: desde las políticas sociales planteadas, hasta el acompañamiento espiritual a las comunidades. Es por esta razón que la edición Nº 8 de la Revista AURORA, una publicación de la Conferencia de Provinciales de América Latina y El Caribe (Cpal), quiere responder a estos Tiempos movidos a través de interrogantes fundamentales: ¿Cómo dejar de ser insensibles al dolor de las multitudes que lloran a sus muertos? ¿Cómo reconstruir relaciones entre personas, grupos, generaciones, naciones, etc., con la conciencia de que todo está interconectado? Este número incluye La Carta al Pueblo de Dios, firmada por varios Obispos del Brasil, sobre el manejo errado de las políticas públicas y sus impactos para la población, entre otros aportes. Consulta la publicación.

Es posible construir una Colombia en paz

El pasado 21 de agosto, se llevó a cabo un encuentro virtual sobre paz, perdón y reconciliación, con nuestros compañeros apostólicos de la Curia Provincial. La reflexión estuvo encaminada a reconocer los retos de la construcción de paz en Colombia y, con ello, a fortalecer nuestras acciones de paz. _________________________________________________________________________________________________________________ En el encuentro sobre paz y reconciliación, gestionado por la Dirección de Gestión Humana de la Administración Provincial de la Compañía de Jesús, compartimos un diálogo que se encaminó a una reflexión colectiva sobre el perdón. Allí participaron tres invitados especiales que representaron distintos sectores de la población que trabajan por alcanzar la paz en el país: el líder campesino del alto Sinú Rogeles Higuita, el excombatiente de las FARC Martín Cruz y el padre jesuita Francisco de Roux. Sus reflexiones y la forma en la que se desarrolló el diálogo son una muestra de que es posible construir una Colombia en paz.   “Nosotros ya no odiamos a nadie”, Rogeres Higuita Rogeres habló desde la humildad, el recuerdo y la esperanza. Con resiliencia comentó que él acaba de superar la Covid pero que sigue adelante: “si pasamos esa guerra que se vivió es imposible que un virus nos fuera a sacar del medio”, afirmó conociendo que aún queda mucho por hacer. Él sabe que ha pasado retos difíciles como la época en la que posiblemente se cruzaba con Martín Cruz en circunstancias diferentes y que desde ese entonces buscaba el camino de la palabra y del perdón. Sostuvo que “dialogar es mejor que pelear” y que este es un principio que tienen muchas comunidades que intervienen en el proceso de paz. Para él la defensa por el territorio en Córdoba es aún su trabajo principal. Esta labor la realiza en conjunto con los líderes indígenas, los líderes afrocolombianos, los consejos comunitarios y otros representantes de las víctimas. Hablando por estas organizaciones les dijo a los victimarios y a la sociedad colombiana que: “nosotros ya no odiamos a nadie”, que algunos han perdonado desde antes y otros ya están en el proceso de perdonar. Por esto su trabajo comunitario es desde la sensibilización de la comunidad y considera que para entender mejor qué es la reconciliación debe entenderse que esta debe surgir “desde nosotros y para nosotros en cada territorio”. Así, hizo énfasis en que cada región tiene su cultura y que a través de la convivencia con los mismos victimarios se pueden superar los daños. Con la mirada siempre en el futuro afirmó que las comunidades no pueden quedarse estancadas en el sufrimiento. Reconoció que no todas las organizaciones de víctimas tienen las mismas posturas frente al perdón y que eso es normal, pero que la mayoría de comunidades tienen una visión similar: “tenemos clarísimo no olvidar lo que pasó, sino tenerlo en cuenta”. Rogeres aplica de esta manera lo que le enseñaron los padres jesuitas sobre el dolor: “se supera cuando se le ayuda a la persona que hizo el daño”. Siguiendo este argumento propuso una convivencia con los antiguos victimarios para empezar una vida nueva sin mirar el daño pasado sino lo bueno que se puede hacer en el futuro.   “Para pedir perdón debemos aceptar que hemos cometido errores”, Martín Cruz Martín Cruz se presentó feliz por el encuentro. Le gusta ser llamado a los espacios de diálogo que aportan a la construcción de un país en paz. Reconoció que el Acuerdo ha sido el mayor acontecimiento de nuestra época y que para todos es una posibilidad de reconciliación. Considera que todo el antiguo Estado Mayor de las FARC está en la línea de aceptar errores deliberados y no deliberados en la guerra. Aceptó que, con el fin de derrotar la guerra, es muy importante el papel de la Comisión por el Esclarecimiento de la Verdad para que se escuchen las múltiples voces y relatos del país. Nos dijo también que el proceso es largo y complejo, que llevamos hasta ahora 4 años, que debemos trabajar más en la sensibilización y, siguiendo lo dicho por Rogeres, afirmó que es necesario llegar a sentarse con las víctimas de frente para reconocer los errores y aportar la verdad. Coincidió también con Higuita en que deben procurarse más diálogos locales donde se acepten responsabilidades concretas y se dé la cara frente a la verdad. Con miras a cumplir el fundamento mismo del proceso, buscar la paz y la reconciliación, Martín considera que es necesario poder pedir perdón, y que, para eso, se debe aceptar el paso previo y este es aceptar que ellos han cometieron también errores deliberados. Desde la voz del partido FARC reconoció que todos sus representantes están de acuerdo con esta línea de pensamiento, que continúan haciendo ese trabajo interno de aceptar lo que se hizo en la guerra para pedir y poder aceptar el perdón de los colombianos. Para él, recibir el perdón es quizá una meta de largo aliento que se presenta necesaria para aceptar la mutua convivencia y poder poner fin a esta guerra que, considera, sigue siendo fatal.   “Pedir perdón y perdonar son un milagro”, Francisco de Roux El padre Francisco de Roux, con su gran experiencia en el tema de la búsqueda de la paz, se refirió a la importancia del papel de la Compañía de Jesús en la reconciliación nacional y al esfuerzo educativo que realiza, con la Red de Fe y Alegría, para formar a la ciudadanía en la justicia social, en la responsabilidad social y en la ética pública. Recordó que el encuentro espiritual es el trabajo de los jesuitas en el país y que este es un trabajo por la dignidad de todas las mujeres y hombres del país. El padre Francisco retomó así la invitación del Papa Francisco a perdonar, a la reconciliación, a la protección de la naturaleza y a tener la grandeza de reconocer las fallas. El padre lidera, también, la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, uno de los mecanismos creados por el Acuerdo de la Habana para alcanzar la paz; allí procura dignificar a las víctimas para

Revista AURORA No. 7 | Migrando hacia lo extraordinario

Consulta la séptima edición de la revista, inspirada en uno de los sectores más vulnerables en el contexto de la pandemia: la población migrante internacional. _________________________________________________________________________________________________________________ Imagen tomada de AURORA No.7 _________________________________________________________________________________________________________________ La población migrante internacional ha sido uno de los sectores sociales más impactados por la pandemia, pues migrar ahora implica un riesgo adicional de contagiarse de coronavirus. A lo anterior se suman otras dificultades a causa de la COVID-19, como el cierre de las fronteras y la disminución de oportunidades laborales. Es por esta razón que la edición Nº 7 de la Revista AURORA, una publicación de la Conferencia de Provinciales de América Latina y El Caribe (Cpal), está dedicada a visibilizar esta dolorosa realidad e invita a los lectores a abrir sus corazones a la población migrante. Tal como lo asegura Rafael Moreno, S.J., coordinador de la RJM-CANA: AURORA quiere así contribuir para que nos sensibilicemos ante la grave situación de millares de personas obligadas a emigrar, para que desarrollemos actitudes y prácticas políticas solidarias y para motivarnos -también a los lectores- a emigrar personal y colectivamente hacia lo extraordinario: “a superar el egoísmo y abrirnos a la otredad contribuyendo en la construcción de un mundo justo e incluyente”. Consulta la publicación.

Semana por la Paz 2020, un llamado a la esperanza

Así se vivió el lanzamiento de la XXXIII versión de la Semana por la Paz, una iniciativa interinstitucional que le apuesta al fortalecimiento de la construcción de paz en Colombia. _________________________________________________________________________________________________________________ “El reencuentro es con la paz” es la propuesta de la XXXIII Semana por la Paz que se realizará el 6 al 13 de septiembre de 2020. Este 20 de agosto se llevó a cabo el lanzamiento oficial del evento, en el cual participaron voceros de las comunidades, artistas invitados y líderes de esta iniciativa. Todos los participantes convergieron en un solo llamado: no perder la esperanza. Reconociendo los hechos de violencia que se han presentado en el país, incluyendo el asesinato de los líderes sociales y las recientes masacres en las cuales han fallecido varios jóvenes colombianos, los participantes del evento presentaron la necesidad de continuar apostándole a la paz y de promover la implementación de los Acuerdos. “Estas situaciones que comprometen la vida no pueden pasar por alto en esta Semana por la Paz. En medio de la urgencia por la paz en las regiones del país, hemos dedicado esta semana a que nos movamos y nos reencontremos con ella. Movámonos desde nuestro corazón y nuestra voluntad. Mantengamos la esperanza por un país mejor”, aseguró Fernando Sarmiento, coordinador nacional de Redprodepaz. El evento contó con la participación de Monseñor Héctor Fabio Henao, director del Secretariado Nacional de Pastoral Social; Monseñor Oscar Urbina, presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia; Patricia Linares, presidenta Jurisdicción Especial para la Paz; Armando Valbuena, consejero mayor de la ONIC y secretario de la Comisión Interétnica de Paz y César López, compositor colombiano quien presentó la canción Hasta que amemos la vida, entre otros invitados. La XXXIII Semana por la Paz contará con más de 50 eventos en todo el país, entre foros, seminarios, encuentros y un gran Concierto Nacional por la Vida. También, se conmemorará el, 9 de septiembre, el Día de los Derechos Humanos y de San Pedro Claver. Toda la programación será transmitida a través del Facebook oficial de la Semana por la Paz Colombia. Consulta la programación general del evento.

‘Recargatón’, una iniciativa para conectar a los niños de los Santanderes

Súmate y apoya a cientos de niños, en el desarrollo de sus actividades educativas virtuales. _________________________________________________________________________________________________________________ La época de pandemia ha sido una oportunidad de reconocer las bondades que tiene trabajar en una institución como el Colegio San Pedro Claver, en Bucaramanga, espacio de formación donde toda la comunidad educativa tiene el deseo, la voluntad y las posibilidades de continuar prestando y recibiendo una educación de calidad, que la virtualidad no ha sido barrera u obstáculo para esto, que las dificultades que se nos presentan tienen solución rápida y viable, y entre todos nos hemos podido apoyar. Esta es una realidad a la cual le doy gracias como maestra y colaboradora de esta obra de la Compañía de Jesús. Además de lo anterior, me permite participar de otros procesos como el de Regionalización, una apuesta que desde hace más de 10 años se viene haciendo para el trabajo conjunto de todas las personas y obras que hacen parte o dialogan con la Espiritualidad Ignaciana y que nos permiten llegar a las fronteras, a los más necesitados. Esta realidad me ha dado la fortuna de conocer y trabajar en otros espacios educativos de la región, como los colegios de Fe y Alegría y la institución que ofrece educación para el trabajo, la Congregación Mariana. Otras realidades, otros contextos, pero un mismo corazón. Son ellos otra cara de la ciudad, son esos rostros que visibilizan la gran brecha educativa que sumerge a una buena parte de la población colombiana, pues a pesar de trabajar con ganas, voluntad y deseo, muchas veces esto no basta para que su proceso educativo continúe de la mejor manera. Son esos maestros, colegas que con total entrega y vocación, intentan dar lo mejor de sí; pero las realidades de sus contextos establecen cantidad de límites que, en ocasiones, hacen decaer la esperanza. Pero la cruda Colombia y la fuerte región de Santander no pueden darse el lujo de que la deserción escolar se convierta en otra estadística que sube en escalada en los datos del DANE, no podemos permitir que nuestros niños y jóvenes de escasos recursos, en situación vulnerable, pasen a hacer parte de las duras filas del trabajo infantil, del analfabetismo nato, pues eso nos implicaría una generación futura con pocas posibilidades de cambiar el rumbo de nuestra historia. Fueron esas las motivaciones que me llevaron a proponerle a Regionalización, a Fe y Alegría y a la Congregación Mariana, un trabajo conjunto en pro de una campaña sencilla que no implicaría mayores gastos para aquellos corazones generosos (especialmente en medio de esta crisis que nos tomó por sorpresa y a todos, de una u otra manera, nos ha afectado), pero que beneficia a un sector de los santandereanos que por sí solo, poco puede hacer: la población infantil. Desde el mes de mayo pusimos en marcha la Recargatón, una iniciativa que nos ha permitido conectar a 420 niños, adolescentes y jóvenes de las instituciones Mario Morales y  Gabriel García Márquez de Girón, Colorados y Claveriano del Norte, Juan Francisco de Barrancabermeja, Minuto de Dios de Cúcuta y Congregación Mariana de Bucaramanga, a través de recargas a celular que hacen directamente los donantes para crear así la escuela de las posibilidades. El WhatsApp es actualmente el medio y el canal de comunicación frecuente en la escuela. ¿Quién se lo iba a imaginar? Nadie. Si quieres unirte a esta linda campaña puedes hacerlo a través de un mensaje al correo recargaton2020@gmail.com, allí recibirás un número de celular de un niño, adolescente o joven que como proyecto de vida ha incluido la escuela para acceder a mejores posibilidades. Ayúdanos a ayudar.

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